SEIS ESCENAS; SEIS SERIES DEL 2013 (I): THE GOOD WIFE (CBS)

No seré exhaustivo. Me centro en lo que he visto, y en lo que me ha gustado, atrapado, fascinado o llamado la atención de todas esas series de televisión que pude disfrutar en el año pasado. No están las "grandes" (tan relativo, este término) como Mad Men, porque la llevo muy atrasada, ni Breaking Bad, cuya última temporada prefiero verla cuando pase tiempo. 

The Good Wife. 04x22 What’s In The Box.

No soy yo de los que, como parece conclusión general, cree que la cuarta temporada estuvo a la altura. La serie de Robert y Michelle King de pronto se veía demasiado encantada de conocerse. Puede que fuera por asumir que la renovación era improbable. O puede que porque los guionistas probaron una nueva estrategia: dejar que su multitud de personajes secundarios ganaran tiempo. 

La ventaja (y la tentación) de haber levantado tan minuciosamente todo ese universo en torno a Lockhart & Gardner es que la opción de los guionistas de dejarlo evolucionar. Ver crecer a sus niños. Más, si, como algunos blogueros han comentado, la serie ha atraído a muchos actores que quieren su momento de “estrella invitada”. 

Claro que, resultaba un tanto desequilibrado que Kalinda tuviera aquella subtrama nuncadel todo cerrada (o cerrada con prisas y en off), o que Cary de pronto tan sólo pasara por allí. Más extraño aún, era que de pronto The Good Wife ya apenas tratara sobre Alicia Florrick: hasta el capítulo 14 no se le planteaba de veras un desafío en cuanto a trama principal.

Eso no significa, claro, que cualquier temporada, casi cualquier capítulo, sea probablemente tres veces mejor que cualquier otra, en especial de las networks que operan en abierto. Que sus diálogos no sean estupendos, o, su ritmo, envidiable.

Pero probablemente donde mucho del talento de los guionistas se percibió fue en el último capítulo. Sobre todo, por su juego con el tono, que es de lo más complicado que se me ocurre que tiene el trabajo de guión.

Es día de las elecciones entre Peter Florick, el candidato demócrata, y Kresteva, el republicano. Zach, el hijo de Peter y Alicia, observa una aparente irregularidad en uno de los lugares de votación. Podría llevarse al mero suspense. De hecho, The Good Wife, como ya he dicho muchas veces, es la serie con mejor ritmo de todas. La tensión porque esa caja a la que se refiere el título del capítulo sea descartada se presenta, en principio, como fundamental para que Peter gane. Eso ya implica, claro, a Alicia. Pero también a Diane Lockhart, ya que por anteriores episodios, sabemos que si él gana, ella será candidata a un puesto como jueza.

Los elementos, como digo, para el suspense están ahí.

Y sin embargo, el capítulo le añade un matiz: el humor.

De hecho, en esta escena que elijo tenemos esta dualidad. El juez que afronta si esos votos de la caja son válidos o no sufre de ciática, y necesita darse paseos de cuando en cuando. Esto facilita que la realización mueva la cámara de una forma mucho más dinámica. Ahí, la tensión, el suspense, el ritmo.

Exacto. Ni los propios abogados saben dónde demonios está el juez. Hasta que se giran y... Sí. Ahí está.

Este movimiento del juez hacia Diane y cómo lo aprovecha la cámara habla muy bien de cómo toda la escena genera, ya desde el guión, acción.

Y se cierra con el juez dando toques de su martillo... en el primer sitio que pilla, en uno de esos paseos.

Al tiempo, es ese punto de humor absurdo que la serie lleva usando con asiduidad, en especial con los diferentes jueces que aparecen en los casos.

Aun más, el capítulo aún dará una vuelta de tuerca más en ambas direcciones, con un giro de la trama: el absurdo cómico y el suspense. Porque de pronto, la caja es abierta y los votos para Kresteva son menos que para Peter… Con lo cual, el lado de Alicia (y Lockhart & Gardner) y el de Kresteva cambian las tornas. Interrogan a los testigos con el objetivo intercambiado: ahora, a Florick le interesa que esa caja sea admitida, y a Kresteva, no.

No es que de hecho el tema que así se refuerza sea extraño a la serie: los absurdos de la ley, y el efecto contrario a cualquier tipo de idealismo al que cualquier personaje pueda aspirar, como han señalado otros blogueros. De hecho, mucho de esto es lo que hará que Alicia sea impulsada a una siguiente temporada en una dirección completamente nueva.

El capítulo sigue ofreciendo detalles estupendos, porque también cambiará de tono, y evolucionará hacia algo más serio, cuando se plantee el problema de Alicia acerca de decidirse o no por Will. Y crea un cliffhanger estupendo que es el que, en parte, hará que la quinta temporada esté siendo mucho mejor que la cuarta.

No salva una temporada irregular. Pero nos recuerda por qué The Good Wife es de lo mejor que se emite ahora mismo por televisión.