¿Por qué el final es reaccionario? ¿Se habla de Dios? ¿Una ficción ha de ser marxista-leninista? ¿Son reaccionarias Medium, Entre fantasmas, y todo el cine de terror que hable del más allá?
¿Por qué se confunde "espiritualidad" con "religión"?
¿Por qué insistimos en que nos den respuesta, y luego no nos gusta que nos contesten, si no es lo que queremos? ¿Por qué sólo admitimos que "nos estafen" si el final a donde nos conducen se pliega a lo que suponíamos o esperábamos?
¿Por qué somos "niños" que queremos saber más, y luego, sabemos, y nos volvemos "adultos" y somos paternalistas?
¿Por qué es "de idiotas" hacerse preguntas sobre el destino, la casualidad, el sentido de la vida, de lo que nos sucede? ¿Es porque tememos que nos acusen de "sensibles"?
¿Por qué el cine fantástico tiene que dar respuesta a nada? ¿Por qué es un género "menor" que el realismo?
¿Por qué nos olvidamos de que el monstruo negro estaba ya en la primera temporada? ¿Por qué obviamos que había ya cosas desde entonces que era improbable que tuvieran una explicación "realista"?
¿Por qué las explicaciones tienen que ser "realistas" si, por favor, todos los que nos dedicamos a esto sabemos, de sobra, que basta con que sean verosímiles?
¿Por qué los viajes en el tiempo han causado estupor y burlas, recogidas hasta en la prensa? ¿Hay un "tope" de ciencia ficción que algunos pueden soportar? ¿O el tope es cuando se incluye lo "sobrenatural", o la fantasía?
¿Por qué todo lo que "se abre" se tiene que "cerrar"? ¿Necesitamos, todavía, la ficción clásica, a toda costa? ¿A estas alturas?
¿Por qué nos conformamos con seguir los mimbres de la ficción y luego nos molestamos cuando los usan para llevarnos a donde quieren? ¿Sólo por que no nos gusta dónde nos lleven?
¿Por qué hay que comparar Los Soprano con Lost, cuando es igual de fácil la reducción al absurdo de ésta como a aquélla? ¿Es tan importante una ficción que hablaba de mafiosos? ¿No nos lo habían contado ya? ¿Son realistas, esos mafiosos, o sólo creíbles? ¿De lo que (supuestamente) habla Los Soprano es más relevante, más profundo, más humano que de lo que (supuestamente) habla Lost?
¿Por qué seguimos creyendo que la ficción tiene que hablar "de algo"? ¿Por qué se necesita un mensaje? ¿Será, como dice Andrés Ibañez, que hemos heredado el odio de la religión por todo lo que sea "divertido", y, por culpabilidad, esperamos o creamos ficción fantástica o ficción de ciencia-ficción (perdón por la redundancia) que "trate" algo de "la realidad"?
¿Qué demonios es "la realidad"? ¿Alguien sabe si los policías son como en The Wire? ¿Alguien conoce algún mafioso como los de Los Soprano? ¿Cómo son los mafiosos? ¿Cómo es la realidad, cualquier realidad?
Estoy de acuerdo con mucho de lo que dices.
ResponderEliminarPor un lado pienso que el final ha defraudado a quienes no quisieron entrar en el juego planteado por los creadores de LOST. La Isla es una zona crepuscular o dimensión desconocida. Muchos lo aceptaron y han encontrado el final coherente y les ha gustado.
Por otro lado creo que es normal que haya espectadores que busquen en la ficción un orden que no existe en la vida. Pienso que aquí ha habido una falta de empatía con los personajes. Los espectadores que se sitúan al mismo nivel que los personajes, viven el mismo "sueño" o "pesadilla" y no se cuestiona la realidad. ¿Un error de los guionistas quizá?
Es posible. Yo creo que es que nadie les puso trabas en los comienzos, y sí a posteriori, y creo que eso ha hecho que se les fuera de las manos con muchos capítulos desperdiciados, y luego, teniendo que meter el acelerador.
ResponderEliminarProbablemente, Lost era una serie para cinco temporadas: o incluso cuatro con 21 capítulos cada una. Pero entre la huelga de guionistas, y cosas parecidas, en fin.