sábado, octubre 20, 2012

GUIONECES: THE GOOD WIFE ¿CUÁNTO NECESITA SABER EL ESPECTADOR SOBRE UN PERSONAJE? (I)


No es una experiencia muy improbable que nos suceda en algún taller de guión o literario. Llega ese momento ansiado y temido en que tus compañeros han leído tu relato, o tu tratamiento, y empiezan a hacerte preguntas. Ciertamente, mejor que lancen cuestiones que no desprecios, pero es posible que en algún momento te cojan a traspié. No, no crees necesario que la historia permita el acceso a cuál es el trabajo del protagonista. No, no te has planteado incluir flash-backs que expliciten cómo han sido siempre las relaciones sentimentales de sus personajes. Muchos de esos compañeros pueden representar tu target de espectador o de lector. Por tanto, es bueno que tomemos nota. Si ellos exigen respuesta a esas preguntas, provoca que revises cuánto dejar fuera, cuánto añadir.

¿Cuánto necesita un espectador saber sobre un personaje?

La cuarta temporada de The Good Wife (CBS, 2009-) ha comenzado no hace mucho. La estoy siguiendo capítulo a capítulo y había algo que empezaba a inquietarme.


Kalinda Sharma es un personaje al que llamarle secundario es complicado, dado que en The Good Wife muchos de los seres que pululan alrededor de la protagonista, Alicia Florick, conllevan subtramas de tanto peso que a veces afectan y hasta colisionan con la trama de la protagonista. Kalinda es la investigadora privada del bufete Lockhardt and Gardner donde trabaja Alicia. Es pieza fundamental en los triunfos en los juzgados, y tal vez fuera ese su rol primero en la mente de los creadores y showrunners, Robert y Michelle King. Pero, como ellos mismos han admitido, la actriz creaba una relación tan especial con el resto de personajes que comenzaron a aumentarle su peso en la ficción.

De forma inteligente, según mi criterio, esto no ha significado que le hayan suministrado un retrato del todo completado, sino que los guionistas han preferido que sus motivaciones y sus objetivos a ratos contengan un mucho de misterio. A medida que The Good Wife ha avanzado, y tal vez también por la lógica propia de una serie que no se quiera guardar tantas cartas durante tanto tiempo, los guiones han ido revelando lo suficiente sobre el pasado de Sharma.

O puede que no. He aquí que la aparición de su exmarido, Nick, ya ha causado que algunos analistas de Estados Unidos consideren que esta falta de explicación/exposición sobre su pasado puede que ahora esté ocasionando ciertos problemas.

Al final de la tercera temporada, se abría del todo esto que llevaba tiempo siendo parte de ese backstory, ahora con carácter de peligro inminente. Kalinda había huido de Nick y éste ahora retornaba a su vida. La relevancia otorgada a esta subtrama fue tal que el cierre se presentaba como cliffhanger: Kalind, pergeñada con un arma, resolvía aguardar a que apareciera su marido, lista para matarlo si era necesario.

Los cliffhangers, qué recurso tan peligroso. Igual te reúnen millones de espectadores que te producen que estos mismos esperen mucho, y hasta demasiado. Ese gran tema, de guiones y guionistas: las expectativas. Para ver un ejemplo de cómo si no se utilizan bien, acabas tomando el pelo, veáse la deriva de calidad de Steven Moffat al frente de Doctor Who.

La cuarta temporada de The Good Wife ha dirigido esta subtrama en una dirección cuando menos extraña. Sí, por fin le poníamos cara a Nick (la del actor inglés Marc Warren) pero su aparición no creaba la espiral destructiva que quizá muchos espectadores anticipaban. O, maticemos, puede que si que haya mucho de autodestrucción en cómo Kalinda recibe la presencia impuesta de Nick en su ciudad y en su vida. Pero no en el sentido más “esperable”.

La cuestión la inauguró Ken Tucker, de Entertanment Weekly.

The intrusion of Nick, Kalinda’s ex-husband […] has thrown off the balance of the storytelling in the new season’s first two episodes […]… the bickering that followed, along with [Nick] hanging around the law firm to make Kalinda uncomfortable, only served to make the viewer uncomfortable.

En The Daly Beast, la cosa ha continuado con un análisis a cuatro manos, y contrapuestos, de otros dos analistas: Jance´s Lacob y Maria Elena Fernandez (no lo acentúo porque así lo escribe ella; imagino que los latinos en Estados Unidos ignoran las tildes cuando escriben para publicaciones en inglés).


Me parece muy relevante la perspectiva de la última, que ahonda en lo apuntado por Tucker, y va más allá.

"We’ve waited a long time to learn more about Kalinda, why she created another identity, and why she likes to keep a mysterious quality. My main complaint is that there’s no payoff. I don’t buy their relationship or the predicament she finds herself in at all. It has not been set up for us."

Estoy con Tucker en que el espectador, como ha sido mi caso, puede llegar a sentir hasta cierta incomodidad. Kalinda, siempre se nos ha mostrado así (o eso podemos creer en primera instancia, luego vuelvo a esto) es una mujer fuerte, distante pero resolutiva. Que Nick haya regresado a su vida, y ella se vea indecisa o contradictoria, lo admite y, al momento, lo rechaza, nos desbarata muchas de nuestra suposiciones sobre el personaje.

Ahora bien, no estoy seguro de que un personaje que se rebele contra nuestras presunciones sea algo negativo, igual que tampoco me parece contraproducente que la incomodidad sacuda al espectador. Si hablamos de una serie de televisión que se emite en “las grandes”, y en abierto, podría verse hasta como un valor, y no un defecto.

Pero en esto nos quedaríamos en los resultados. Vayamos a la técnica; al guión. ¿Es cierto, como dice Fernandez, que no ha habido set up? ¿Y era éste imprescindible?

Veamos. ¿Hubiéramos encontrado apropiado que en las anteriores temporadas se hubiera incluido un flash-back donde se nos hubiera mostrado la relación entre Kalinda y quien era entonces su marido? Una posible respuesta es que si entonces “no pegaba”, ahora los guionistas no se pueden “sacar de la manga” algo tan importante, de tanto peso, ya que no había habido ese set up, como, en parte, argumenta Fernandez.

Sin embargo, tengo mis dudas. Si algo común en las series es que, como novelones audiovisuales que se extienden y ramifican si duran las suficientes temporadas, se nos oferta la ocasión de indagar en cada carácter. Según mi criterio, “sacarse de la manga” es un juego de manos más patente cuando, de pronto, aparece un padre, un hermano, una madre cuya relevancia (para el personaje en cuestión) sí que de veras nunca se mencionó anteriormente. En el caso de Nick, por el contrario, su efecto en Kalinda si bien no fue enfático, ni merecedor de flash-backs, sí estaba ahí. Por algo, se buscó una nueva identidad. Por algo, Peter Florick le ayudó en ese sentido. Por tanto, sí que hubo su set up. Pero sería demasiado leve para Fernandez, o los espectadores que coincidan con su postura.

De lo afirmado por Fernandez, aún se sonsacan más cuestiones. Según ella, como espectadora (y como analista, y que se mezclen ambas cosas puede que tampoco sea baladí) ella estaba esperando que se le diera más información sobre Kalinda y Nick ya desde anteriores temporadas, y de ahí su decepción.

Habría que revisar si “la decepción” es inmanente a la ficción. Siempre que escribes, un relato, un guión para cine, o para televisión, creas expectativas, anticipas. Y siempre, antes o después, llega el pay off; “cumples” en relación con lo prometido. Por supuesto, cumples según tu criterio. Luego, está el criterio de cada espectador o lector, y de ahí la potencial decepción.

A Fernandez le parece que en los guiones de estos primeros capítulos no hay pay off, porque lo visto hasta ahora en The Good Wife no es lo que imaginaba, con respecto a sus expectativas sobre esta subtrama.

¿Hay un cierto tipo de espectador que prefiere lo explicativo y el subrayado a lo implícito? ¿Es ese mismo tipo de espectador uno acostumbrado a que esto sea más común en las series en abierto, y por eso que se dé en The Good Wife, y no en una serie de AMC, o HBO es lo que le descoloca?

¿Será que estas dos clases (o estos dos ánimos a la hora de visionar una serie, quién sabe) son pues incompatibles? 

Seguiremos con todo ello. En el próximo post.

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